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El Espacio de Rinaldi

jueves, 4 de febrero de 2010

El Ocaso del Nuevo Imperio Romano

Déficits gemelos, una mala palabra simpática para los economistas y, sin embargo, la exposición más frecuente de la economía norteamericana durante la última década. Así es, tal como lo leen, déficit, ese término de origen galo que tanto nos aturde cuando la escuchamos y tanto nos perturba cuando la leemos; casi un cliché.
¿Qué tiene que ver esto con el Imperio Romano y más aún, con el ocaso del que se asomó alguna vez en el hemisferio norte? Una sola palabra, también mala para muchos: devalución. Que me estaquen si no es cierto que estas palabras unidas desatan la psicosis en cualquier sociedad organizada de la actualidad. ¿Qué devaluación? La impensada, la que nadie espera, la que nadie se anima a nombrar, pues significa la sombra y la ecatombe total. Así es señores, la devaluación (más precisamente sería una depreciación) del dólar es inminente. Bien se puede producir a cuentagotas, bien puede suceder algo que excite los acontecimientos y la precipite pero que sucederá, denlo por hecho (si mantenemos las condiciones actuales constantes).
Verán, mantener un déficit montruoso como el que tiene los EE UU hoy en día es sinónimo de depreciar la moneda. Para que se den una vaga idea de la magnitud de la cifra, si tradujéramos en billetes de cien dólares el déficit norteamericano actual muy fácilmente podríamos llenar el volumen del estadio Monumental de Núñez.
¿Es grave esto o será otro de los avatares del sistema financiero? No deseo causar alarma pero es de preocuparse. La primera consecuencia es la salida a la luz de un sustituto del dólar como unidad de ahorro mundial. En las condiciones actuales sólo el yen y el euro pueden cumplir ese rol y, a juzgar por la irrecuperable alicaída de la economía japonesa comparada a otros tiempos del "milgaro del Sol Naciente" y sin mencionar la cantidad de tiempo que el yen permaneció en la zona del interés cero, el euro es el único candidato. He aquí una buena noticia para los marxistas, esto lejos de beneficiar a Europa la sumergería en una terrible crisis de la cual difícilmente pueda salir. ¿Por qué? Por lo terriblemente caras que se volverían sus exportaciones, inalcanzables no sólo para el mundo sino entre ellos mismos. Por las estructuras económicas de los países integrantes de la UE algunos tardarían menos en entrar en crisis que otros. La elite norteamericana petrolero financiera intetaría rápidamente transformar sus ahorros en euros lo cual aceleraría aún más el proceso, actuando como agente catalizador de la caída.
Simultáneamente, los hidrocaruburos se irán haciendo cada vez más escasos y caros. Sobrevendrá la imperante necesidad de la energía alternativa y aparecerá nuestra única esperanza: el hidrógeno. Dado lo extremadamente barato que es producirlo (hagan una cuba electrolítica en sus casas y conecten una simple batería de 9V en un medio acuoso y las burbujas son el preciado hidrógeno) muchos países no tardaría en empezar a desarrollar procesos de industrialización gracias a la creciente demanda mundial de este elemento. ¿Adivinen cuáles serán esos países? Principalmente, los más necesitados que están a la espera de algo en que especializarse para obtener ingresos que los movilice para superar su desesperada situación.
De esta manera, queridos lectores, se producirá el efecto distributivo de la riqueza más espectacular que la humanidad haya visto jamás. Europa sumergida en crisis, los EE UU no serán más la Roma de los tiempos que corren y los países más pobres se enriquecerán a ritmo acelerado. Se producirán movimientos migratorios masivos, acelerados por los cambios climáticos. ¿Qué más podría decirles? ¿Acaso no es impresionante como algo tan simple como la variación en el valor dado a una unidad de moneda abstracta puede cambiar la faz de la Tierra?

9 comentarios:

  1. Desde mis escasos conocimientos sobre economía en general, me nace preguntar: ¿Estados Unidos no se habrá sometido a una profunda reforma monetaria (vuelta al patrón oro principalmente) al vaticinar el inminente colapso?

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  2. Debo decirte, querido amigo, que considero esa posibilidad tan remota como improbable. Dejame explicarme: volver al patrón oro actualmente significaría igualar (al menos) la masa monetaria norteamericana de dos trillones de dólares con las reservas en oro de 45000 millones solamente. Si quisieran reducir la masa monetaria tan drásticamente desataría una monstruosa hiperinflación.
    Sin embargo, tu enunciado sería muy útil en caso de ser posible para solucionar los problemas financieros existentes. Es más, cortaría de raíz la sequía crediticia internacional y enviaría al mundo hacia la senda de la recuperación. Aunque, como hemos visto, es una quimera total.
    Un abrazo, espero que sigas visitando el espacio.

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  3. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  4. Hasta casi el final del presente texto iba a mandarte a cagar y a decirte que utilices tus extra-ordinarios conocimientos para proponer mejoras y no para anunciar el apocalipsis.
    Luego, me tranquilicé cuando vaticinás un final feliz para los que menos tienen.
    Pero finalmente me desilucioné porque la sangrienta historia siempre termina demarcando el mismo círculo asesino: Necesidades de los imperios = paises ricos en materia prima explotados + vaciamiento de recursos
    Más pobreza, más desigualdad.
    En fin........da gusto leerte, pero he sentido en este post que con todo lo que sabés podés escribir algo mucho más "progesistamente" positivo, distributivo y eficaz.

    Saludos camarada.

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  5. Considero importante el rol que cumple el escrito de Juan. Si bien nuestros sueños corren hacia un horizonte de utopías, seria insulso alterar la predicción con tal de que encaje en ese mundo onírico.
    Sin embargo creo que al texto debería agregársele un anexo: un análisis de como nuestro actuar puede (debe) transformar ese futuro que se aproxima, forjar los cimientos para el lugar que soñamos, y cuando llegue saber cómo abordarlo.
    Enhorabuena que tenemos mentes como la de Juan, el puede, mediante la observación y el análisis, elaborar hipótesis sobre qué es lo que va a pasar, ahora nosotros tenemos que entender cuál es nuestro rol en este devenir.
    Lo triste sería que nos traguemos el cuento de que este mundo no va a cambiar, de que no vale la pena que nos compliquemos. Son mentiras, si va a cambiar.
    La revolución no vendió su esperanza amigos. Un abrazo.

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  6. Espero se haya entendido que admiro el amplio conocimiento de Juan en una edad tan corta como la nuestra.
    Juan, me gustaría aprender que sucedería en Argentina en el mediano plazo y como ves que están haciendo las cosas los Kirchner en vistas a la reactivación económica (hubo desactivación?)

    Saludos camaradas.

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  7. Muy buenas, mis queridos amigos. Disculpen la tardanza. Me borré a mi ermita a estudiar para rendir este martes. Desde luego, muchas gracias por su invaluable aporte y crítica que tanto me enriquece.
    En cuanto al horizonte económico en corto/mediano plazo estoy elaborando un pequeño análisis que debería estar listo para dentro de una semana. Les pido disculpas si fui un poco pesismista en mi visión, pero no puedo ir en contra de lo que intuyo.
    Responderé en breve todas sus inquietudes que, desde luego, me resultan sumamente interesantes.
    Un gran saludo para ustedes.

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  8. Ah, olvidaba rescatar que es excelente la idea del anexo. La voy a poner en práctica en breve.
    Como ven, sus ideas son para mí oro en polvo. Me ayudan a salir de mi visión y extenderla kilómetros más lejos. Muchas gracias.

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  9. Esperamos estar leyéndote pronto Juan. Éxitos con el estudio.

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